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EBS es un taller belga que, durante los años ochenta, buscaba expandir su mercado a la fabricación. Para lograr esto, presentaron a Renault una versión convertible del Supercinq. Los franceses quedaron muy impresionados, pero debido a la llegada de un nuevo CEO, el contrato fracasó. “A quién le importa”, pensó EBS, quien decidió seguir adelante independientemente de la producción de este convertible. La producción del automóvil comenzó en 1987 y duró hasta 1996. Oficialmente, solo se produjeron 886 Super-Cabrios, de los cuales solo 130 tenían las marcas deseables GT Turbo, ofreciendo a su afortunado conductor una experiencia de peluquería en la carretera.